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MÚSICA Y EMOCIONES

Desde la antigüedad la música se ha considerado como un arte. Es un código, un lenguaje universal, que está presente en todas las culturas de la historia de la humanidad. Curiosamente, los signos jeroglíficos que representaban la palabra “música” eran idénticos a aquellos que representaban los estados de “alegría” y “bienestar”. Y en China, los dos ideogramas que la representan, significan “disfrutar del sonido”.
Alegría

La banda sonora de la película “El Libro de la Selva” es un perfecto ejemplo de transmitir esa emoción. La versión original en inglés fue compuesta por el trompetista y cantante de jazz Luis Amstrong. La versión en español latino vino con la voz del actor y cantante mexicano Tin  Tan y el trío “Los Panchos”.
Tristeza
“Stop criyng your heart out” o “Que tu corazón deje de llorar” de la banda de rock/pop inglesa “Oasis”, parte de la banda sonora de la película “El efecto mariposa” dirigida por Eric Bress y protagonizada por Ashton Kutcher.
Auto-nombrada como “la banda heredera de The Beatles”, Oasis y más propiamente Noel Gallager, compositor principal y líder, logra combinar el poder del lado más melancólico del piano (acordes menores en 7ma con pulso repetitivo e insistente muy utilizados por Paul McCartney), la voz electrizante de Liam Gallager con un canon de ultra tumba realizado con
efecto de megáfono (recurso muy utilizado por Jhonn Lennon) y un cambio de tono al entrar en el coro o estribillo a una nota mayor bien recibida por un cuarteto o quizá sexteto de cuerdas que le dan calidez y tornan, de a poco, a limpiar las lágrimas y volver a empezar con fuerza.
Todo en una canción pop sin despeinarse y con gran estilo.
Ira
“tourette`s” (así, con “t” minúscula) canción de la banda de grunge Nirvana, compuesta por Kurt Cobain e incluida en el disco “In Utero” de 1993.
A mi entender es una canción hecha al estilo “punk” ya que consta de solo dos partes: A (riff con una secuencia de 4 acordes que se repiten) y B (los típicos cortes acompañados de sílabas cortas “¡Hey, hey!” muy al estilo
Ramones). No tiene estribillo o coro ni tampoco algún cambio melódico o tonal, la letra está plagada de incongruencias, groserías y tic`s vocales (algunas características del Síndrome de Tourette a quien hace alusión la canción).
Kurt tenía una personalidad extraña, era tranquilo y hasta juguetón en el cotidiano, pero a la hora de tocar la guitarra, componer canciones y subir al escenario, desataba una furia contenida debido a una niñez y adolescencia de abandono y falta de oportunidades que lo hacían portavoz de una joven generación “noventera” que recuperó el rock de las manos de los virtuosos y la devolvió al pueblo como herramienta catártica de frustraciones.
Miedo
Acá elegí algo distinto a lo anterior, pues no hablaré de canciones, quiero compartir un sonido macabro producido por “El silbato de muerte” un aerófono precolombino inicialmente de uso ritual tallado en piedra y luego popularizado en cerámica por la cultura Azteca.
Su sonido agudo y estremecedor era similar a un grito de dolor que hacía dudar de que fuera producido por un emisor humano. Se encontraron miles de estos instrumentos a lo largo del tiempo y el espacio físico del territorio actual de México, Guatemala y Honduras. Musicólogos y antropólogos creen que “El silbato de muerte” fue la primer “arma de
terror psicológico” que se utilizó en la américa precolombina, ya que hay indicios de que era usada por miles de soldados de forma unísona durante las batallas e invasiones a otras tribus. Una escena estremecedora. .(Carlos Sivila Zárate/ es cantautor, y gestor cultural potosino).

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